Por Damián Zárate
No respetar los cánones estándar de cierto orden a nivel general, me permitieron disfrutar momentos impensados en diversos aspectos. No solo hablo del cotidiano, sumo que soy un lector voraz pero desordenado, sin seguir una línea de estilos, ni autores. Este introito me lleva a formular la hoja de ruta de mi vínculo con la cultura musical y teatral de la Ciudad de La Plata en el último lustro.
Todo lo que tiene que ver con mi vida lo relaciono con la Radio, y ésta no es la excepción. La estrecha relación con las noches de espectáculos en la “ciudad de las diagonales” tienen un vínculo indivisible con la labor semanal en #LaViejaCompañeraDeEmociones, la Radio.
Transitando la tercera temporada de #LaFrontera (Martes y Jueves a la medianoche en #AM1390) y en menor medida, pero importante también al haber incluido entre nuestros entrevistados a artistas en Jaque y Mate (Domingos 12hs en Somos por canal 7) me permitieron conocer personas que abrieron las puertas a diversas casas de arte para sumar figuritas en el álbum de las noches de telones y corcheas. Esto es un recorrido personal y desordenado de quien escribe, pero que puede servir para descubrir las incontables posibilidades que tiene nuestra ciudad cada fin de semana con propuestas bien amplias desde todo punto de análisis.
Conscientemente el kilómetro 0 de este recorrido de radio y espectáculos es el "Teatro Bar" en calle 43 entre 7 y 8, la relación con Flavio ya tenía algunos almanaques de experiencia desde cuando hacíamos #LaIsla en Universidad y revitalizado en el último tiempo: propuestas variopintas, música, teatro, stand up, homenajes, estilo Café Concert... Una sala cara a los sentimientos de los platenses porque ahí se bailaba y es una reminiscencia imprescindible para los que tienen más de 45. Sólo por nombrar algunas propuestas que vi: Soledad Villamil, Desencajas con Darío Sztajnszrajber, Sbaraglia actuando y cantando, los monólogos de Rodriguez-Galatti, Liniers & Mont, la música de Banana Pueyrredón, Sobredosis de Soda, Raúl Barboza, Viralizados... y muchos más.
Viajar te enriquece, te nutre, te da recursos... y el viaje por el espectáculo también. Hablar con los artistas, y que luego te inviten a verlos en escena te genera un compromiso en el buen sentido de la frase. En el nombre de Gastón Marioni se resumen dos propuestas bien diversas, desde hace algunos años dirige el domicilio por antonomasia del teatro de nuestra ciudad como es el Coliseo Podestá y también está a cargo de la encantadora sala "Teatro Estudio" (calle 3 entre 39 y 40). En el Coliseo encontramos una casa para viabilizar nuestras charlas en la TV con Julio Chávez, Víctor Heredia, Sandra Mihanovich, Nahuel Penissi, Alejandro Dolina con su “La Venganza será Terrible” y David Lebón gracias a Alma Festa y Nacho Pereyra.
Primero hablamos y luego hablaron ellos con el dialecto del arte rompiéndola sobre el escenario del Coliseo. Ese escenario, además tiene la propuesta de "Ciudad en Escena", obras de gran nivel a un módico precio: por ejemplo observé a Luis Machín con "El Mar de Noche" en este ciclo y hace semanas lo hizo en el Teatro Estudio. También sobre el Coliseo disfruté en varias oportunidades del talento de Gabriel Rolón y todo su magnetismo.
Nombramos "Teatro Estudio" y ahí uno se sienta en butacas cómodas y observa teatro de autor sintiendo la respiración de los artistas por la cercanía con ellos. Ahí por primera vez disfruté a los Ridiculum Vitae (genial grupo humorístico-musical que pasó por tantas salas) y en la Temporada 2018 a "Las Heridas del Viento" de Miguel Jordan y Mariano Fernández y a una panadera formidable encarnada por Virginia Lago. Siempre el mail de Fermín Epele mostrando lo que viene y los contactos con los artistas nos hacen confluir en la hermosa sala.
También el encanto y la particular infraestructura de la Sala 420 nos mostraron sinapsis-sinopsis con Juan Pablo Pereira. La formidable dirección de Manuel Vignau nos llevó hasta “Espacio 44” (calle 44 entre 4 y 5) con su “Cabaret Político”, infaltable la información diaria con diversas propuestas en formato de unitario o ciclos de Federico “Poni” Rossi con su “Huella Errante” y su inclinación hacía el folklore nacional: nos permitieron hablar previamente a presentarse en nuestra ciudad con: Pato Molina, Franco Luciani, Juan Falú y Vitillo Ábalos, entre otros.
La ruta tiene muchos kilómetros de cultura y casas de arte con acento particular y no se detiene: el mágico teatro de la Universidad de La Plata (calle 10 Nº 1076 entre 54 y 55), dónde disfruté del clásico de Pepe Soriano “La Nona”, ya un poco platense por la cantidad de años en cartelera aquí…
El año pasado abrió sus puertas el Teatro Metro, con la mirada artística y musical de Carlitos Mancinelli, más el esfuerzo constante de Diego Velázquez, Valeria y Facundo. Por su puerta de entrada es el “Gran Rex” de La Plata. El espectáculo iniciático fue Baglietto-Vitale y a partir de ahí se convirtió en un domicilio clave para el recorrido cultural de la capital de la provincia: el programa de TV tuvo el privilegio de grabar con Daniel Agostini y María Creuza que luego descollaron sobre tablas. En esa sala disfruté de: los míticos Pedro & Pablo, Diego Peretti, la misma María Creuza, Jimena Barón, otra vez, como en el Coliseo, al versátil Gabriel Rolón (a sala desbordada), Gillespi, Luis Rubio y más…
Como olvidar el Jasz Café en calle 9 y 53, único lugar exclusivo de ésta música de sustrato. Sobre la barra charlando con el amigo Javier Szenfeld disfrutamos, junto al melómano Lolo Poncetta, un tributo a Louis Armstrong descomunal.
Y al faraónico e histórico teatro La Nonna en calle 3 y 47. Leo Ringer y esta sala de indivisibles, como dice la canción de Serú Girán, propuestas variadas para las tres salas de la esquina característica que es museo, no sólo por lo que tiene, sino por la historia a la cual pudo sobreponerse (se incendió en el año 2004). Es el lugar de los infantiles de la ciudad, una tradición familiar ineludible.
Es un trabajo inconducente intentar resumir la historia cultural de una de las grandes capitales culturales de la República Argentina, esto es solo una hoja de ruta en retrospectiva de alguien que desde el desorden, disfrutó de las salas y espectáculos que tiene y tuvo esta magnífica ciudad intentando ser un “Sommelier Cultural”. El desafío es que cada lector arme su propio recorrido, pero siempre nutriéndose de las grandes propuestas que a diario tenemos en cada barrio…