30 de mayo de 2022
Cantante, pianista, compositor y vocalista de Fluido, una banda de rock rosarina con reconocimiento nacional. Sin dejar la banda llega con su proyecto solista para presentar nuevas canciones como “Masticalo”. Entra en La Cueva: Lolo Luciani…
Estás presentando “Masticalo” junto a Pato Abate ¿Cómo fue el proceso de grabación?
La canción surgió porque además de seguir en la banda Fluido, yo siempre hice participaciones con otros músicos y bandas. Con Pato Abate nos conocemos hace muchos años, y luego de un tiempo nos reconectamos porque estamos los dos viviendo en la localidad de Funes. Él me comentó que tenía su estudio en su casa y que tenía algunas bases armadas. Y una de ellas era con la que terminamos haciendo “Masticalo”. Además con Pablo Araoz hicimos el videoclip. Finalmente Pato hoy termina siendo parte de Lolo Luciani Proyecto para actualizar el sonido de la banda.
Es algo totalmente distinto a lo que hacés con Fluido…
Yo tenía ganas de hacer algo distinto, con otro tipo de beat. Con Fluido somos una banda muy fuerte y con Lolo Luciani Proyecto trato de ser más cancionero. El resultado de la canción nos gustó mucho y nos empujó también las buenas devoluciones que tuvimos.
No es lo mismo ser parte de una banda que tener un proyecto solista. ¿Cómo llegás a esa decisión?
Son dos cosas diferentes. Con Fluido, a pesar de los cambios de formación, siempre los que estuvimos en la composición fuimos Rolo Prado y yo. Me atrevo a decir que más que nada Rolo que siempre trae las ideas, yo aporto las melodías y letras. El estilo que caracteriza a la banda es la potencia, la fuerza. Pero a mi me gustan también otro tipo de canciones y así es como surge mi proyecto solista. Sin pensar en dejar la banda que es mi principal proyecto. Y como tenía algunas canciones compuestas y no las quería dejar cajoneadas me lancé como solista. Son dos desafíos distintos porque yo acá llevo la dirección de todo.
¿Esas canciones que tenías algunas fueron compuestas durante la pandemia? ¿Aprovechaste más el tiempo para componer?
Fue un poco relativo, el disco ya estaba hecho pero sí se gestaron un montón de cosas. Hay músicos que viven solos y tal vez tengan otros tiempos, yo vivo en pareja y para componer uno tiene que tener su espacio. Yo en casa estoy en modo familia. Me gusta separar eso, pero algunas cosas surgieron como la canción “Masticalo”, por ejemplo.
¿Hace unos meses hay una explosión musical y cultural cómo vivís como artista esta normalidad nuevamente?
Con mucha ansiedad. Nosotros nunca dejamos de ensayar durante este tiempo, más allá de tener fechas o no. Por suerte se reabrió y desde principio de año empezamos a ser convocados para tocar en eventos. Tocamos en Güemes, en Vorterix Rosario, fuimos a Palermo hace unos meses y seguimos. Ahora tenemos una fecha el sábado 11 de junio con Fluido en Floyd en Rosario, y el sábado 10 de septiembre tocó con Lolo Luciani Proyecto en Capital.
Seguramente en el medio vayan surgiendo nuevas fechas…
Seguro sí, sobre todo en Capital que nos gustó mucho el club Lucille, y también tocar en el oeste dónde tenemos mucha gente que nos sigue. Por suerte estamos volviendo a los escenarios y a la ruta que extrañábamos mucho.
Te llevo hacia atrás en el tiempo. ¿Recordás tu primer contacto con la música?
En la casa de mi abuelo había un piano, mi abuelo era tenor, cantante de ópera. Y mi viejo, si bien no era músico, es un melómano que colecciona discos y me llevaba a varios shows. También tengo otros músicos en la familia. Yo de chico mamé todo eso, incluso tengo una foto de cuando tenía un año, dónde estoy sentado en el piano.
¿Y cuándo empezaste a aprender música?
A los 7 años empecé en el Conservatorio a aprender piano. Hice seis años allí, y fue mi base. Cuando me lancé a cantar tenía algunos conocimientos técnicos por mi abuelo, y todo lo armónico y teórico por el piano.
Toda esa técnica te la dio la música clásica en piano…no partiste desde el rock…
Mi viejo era muy rockero. Era un beatlemaníaco, pero le gustaba mucho el rock nacional. También me llevaba a ver a la Trova rosarina. Así fui llegando a toda esa música, pero mis bases por mi abuelo y el Conservatorio son de música clásica.
¿Recordás el primer disco que te compraste con tu propia plata?
En realidad fue plata a medias, yo estaba en la primaria, y me regalaron dinero en mi cumpleaños. Y fui a comprarme el disco “De Ushuaia a la Quiaca “de León Gieco, pero eran dos discos. El disco uno tenía todos los mejores temas y el dos eran otros. Y yo me compré el dos, pero mi viejo me dijo que no tenía tantas buenas canciones y me acompañó a cambiarlo. Me recomendó que me lleve “Doble Vida” de Soda Stereo, y ese disco me cambió la vida. Se lo debo a mi viejo.
¿Siempre fue la música en tu vida o hubo otra pasión?
Hubo otra pasión. Yo hice hasta los 12 años el Conservatorio y dejé todo porque ingresé en las inferiores de Rosario Central y ahí llegué a practicar hasta la cuarta división. Entonces dejé la música por el fútbol. Viajé a Lima en Perú, Tarragona en España y muchos otros torneos. Pero nunca me saqué los auriculares de las orejas. Y en un momento tuve una lesión, me tuvieron que operar, y en ese momento me volqué nuevamente a la música y no la dejé nunca más.
¿Qué sueños cumpliste gracias a la música?
El sueño que tenía era que me vaya a ver alguien de Rosario, y después empezamos a viajar a Rafaela, Paraná para tocar, y ya estaba cumpliendo un sueño. Cuando fuimos a Buenos Aires y también llenamos sentí que estaba cumpliendo otro sueño. También cuando compartí escenario con bandas como Carajo, Eruca Sativa, y demás.
¿Qué proyectos se vienen en lo que queda del año?
Se vienen dos canciones más que pronto voy a subir a las plataformas y redes. Una es una versión de “Billie Jean” de Michael Jackson. Con Fluido también tenemos cosas para presentar y vamos a tocar el sábado 11 en Floyd en Rosario, y mi fecha solista en septiembre en Capital.
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